Javier Fernández del Moral (Febrero 1990 - Junio 1998)

Javier Fernández del Moral, Decano de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid desde 1990 a 1999.

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Nace en Madrid en 1947, estudia bachillerato en el colegio “Gymnasium español”, con el Premio Especial al mejor expediente de la promoción. De 1965 a 1970 cursa la licenciatura en Ciencias Químicas de la Universidad Complutense de Madrid y termina su doctorado en esa misma especialidad en 1980 con una tesis doctoral sobre modelos de comunicación de la ciencia experimental, basada en metodologías sistémicas, que aplicó después de estudiar modelos de interdisciplinariedad del biólogo norteamericano  Bertalanffy y de la Universidad de la Sorbona.

En 1968 ingresa en la Escuela Oficial de Periodismo del Estado y se gradúa dos años más tarde, concluyendo todo el plan de estudios de cuatro años. Desde entonces trabaja como periodista especializado en temas científicos, colaborando en medios escritos como “ABC” y “Diario 16”, y en Televisión Española con Ramón Sánchez Ocaña y Alfredo Amestoy. De 1972 a 1978 trabaja en la plantilla de la revista “Actualidad Española” como redactor científico a las órdenes de su director, Juan Pablo de Villanueva.

En 1975 se encargó de la asignatura “Información Periodística Especializada”, que se impartió ese curso por primera vez en el quinto año de la licenciatura de periodismo. En 1983 obtuvo por oposición la cátedra de dicha materia, después de  un proceso de selección con otros cinco candidatos que duró casi un mes, convirtiéndose así en el primer catedrático de una materia  que se imparte en la actualidad en todas las universidades con licenciatura o grado en periodismo. A finales de los años ochenta, fundó el Instituto Español de Comunicación Especializada (IECE), para unir a todos los investigadores y docentes de Periodismo Especializado de todas las universidades españolas, del que sigue siendo Presidente en estos  momentos. Es además responsable de la docencia y la investigación de la asignatura “Información Científica y Técnica” de la universidad Complutense de Madrid y por otra parte, miembro fundador y miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Periodismo Científico de la que sigue siendo miembro activo, llamada ahora Asociación Española de Comunicación Científica (AECC), y de su homónima europea.

Ha sido director de comunicación del Consejo General de los Colegios Farmacéuticos de España (1978-1980) y de los Ministerios de Sanidad y Seguridad Social, de Transportes Turismo y Comunicaciones y Agricultura, Pesca y Alimentación en los primeros gobiernos democráticos de España con Adolfo Suarez y Leopoldo Calvo Sotelo. Con esta experiencia, abrió una nueva línea de investigación en su disciplina sobre el periodismo de fuente en la información especializada y fundó junto con otros destacados directores de comunicación la asociación DIRCOM (Asociación de Directivos de Comunicación), de la que fue Presidente desde 1994 hasta el año 2000.

Es investigador de numerosos proyectos financiados de carácter nacional y alguno internacional. De tres de ellos como Investigador Principal, dos coordinados del programa I+D nacional. Autor de varios libros, entre otros de títulos como: “Modelos de Comunicación Científica para una Información Periodística Especializada” (Dossat, 1983); “Fundamentos de Información Especializada” (Síntesis, 1979); “Áreas de Especialización Periodística” (Fragua, 1999; “Periodismo de Fuente” (UPSA, 2002); “Periodismo Especializado” (Ariel,, 2004), o “El Análisis de la Información Televisiva. Hacia una medida de la calidad periodística” (Dossat, 2008). Además es autor de más de una veintena de capítulos de libros y numerosos artículos en publicaciones científicas especializadas. Director de varias colecciones de libros sobre comunicación y miembro de comités editoriales nacionales y extranjeros. Presidente del Observatorio Publicidad y Sociedad y director del grupo de Investigación vinculado a él. Director de más de cuarenta tesis doctorales y más de setenta tesinas y trabajos de investigación para el DEA o Trabajos Fin de Master. 

Ha sido Jurado de numerosos premios periodísticos y de comunicación entre los que destaca el de Jurado del Premio Príncipe de Asturias de Humanidades y Comunicación. Conferenciante en la Real Academia de Farmacia, el CESEDEN y  en más de doce universidades extranjeras como  Columbia de Missouri, Lomonosov en Moscú, las colombianas Javeriana, La Sabana o Uninorte, La Austral en Argentina o la Pública de Buenos Aires, dirigiendo cursos en varias de ellas y en casi todas las universidades de verano de España. Presidente de la Junta de Fundadores de IBERCOM, socio de la Sociedad de Sistemas nacional e internacional y miembro del Consejo Asesor del Programa hispano-norteamericano “Business Opportunities”, un “executive program” de la Universidad de Harvard.

En 1990 es nombrado Decano de la Facultad de Ciencias de la Información, cargo que obtiene por dos periodos consecutivos. Al terminar el decanato, ocupa el puesto de director de Comunicación de la Fundación General de la Universidad Complutense, y posteriormente Director General del Foro Complutense,  dependiente de la misma Fundación. Desde el año 2000 es el Director Académico del Centro Universitario Villanueva, adscrito a la Universidad Complutense. 

Es socio fundador de la Sociedad Española de Documentación e Información Científica (SEDIC)  y  de la Academia de Televisión de España, de las que sigue siendo socio activo y académico. Desde 2007 es director de la revista de pensamiento “Cuenta y Razón”, fundada por Julián Marías y desde 2010 es el tercer presidente de la Fundación Diálogos, fundada por Juan Pablo de Villanueva al que sustituyó Antonio Fontán. Vicepresidente de IC-Media, y vicepresidente del instituto internacional de estudios relacionados con la familia: The Family Watch.

 

El Decanato de Javier Fernández del Moral

Al acceder al Decanato en 1990, se estaba decidiendo, por parte de amplios sectores del Consejo de Universidades con intereses ajenos a las Ciencias de la Información y a las profesiones relacionadas con la comunicación, el que las Facultades  Universitarias de Información y Comunicación desaparecieran como tal y sus titulaciones pasaran a ser tan solo de segundo ciclo. La primera acción que abordó con éxito fue evitar esa decisión, uniéndose desde el primer momento con sus colegas de otras universidades, comenzando por la decana de la Facultad de Bellaterra en Barcelona, la profesora Fontcuberta. Se constituyó entonces la Asamblea de Decanos con las facultades existentes, cinco públicas (Madrid, Barcelona, País Vasco, Santiago de Compostela y Sevilla) y tres privadas (Navarra, CEU de Valencia y Pontificia de Salamanca). Presidió la Asamblea de Decanos durante  sus dos mandatos y se consiguieron acuerdos históricos, poniendo en marcha el primer plan de estudios oficial.

Otra aportación importante fue la de iniciar el camino de la experimentalidad. Nuestras facultades estaban consideradas con  grado de experimentalidad nulo, y conseguimos darle ya ese carácter, lo que supuso por una parte un incremento en las matrículas y por tanto un desgaste político, pero una inmediata respuesta en cuanto a dotaciones y aportaciones técnicas tanto de aparatos, platós, estudios y personal cualificado para su manejo. Se firmaron numerosas acuerdos de prácticas muy ventajosos, y siempre remunerados, respetando un acuerdo al que habíamos llegado las facultades con Asociaciones de la Prensa y Sindicatos, entre ellos, el más ventajoso con RTVE, cuyo director General, Jordi García Candau, antiguo alumno de la Facultad, hizo una generosa oferta que llegó incluso al Instituto  de RTVE, donde habían comenzado nuestras clases antes de llenar el edificio que ocupamos ahora.

Se consiguió la frecuencia de radio para poder emitir al exterior, gracias a una donación de Radio Nacional de España, siendo su director Diego Carcedo. Igualmente se puso en marcha Telecomplutense, que consiguió convenios con las televisiones locales para hacerse cargo de los informativos. Un acuerdo con Telecinco permitió producir un programa cultural en verano, sobre los cursos de El Escorial, que consiguió unos niveles de audiencia históricos en la franja horaria de madrugada en los que se emitían.

Siempre destacó durante su mandato un afán integrador de las profesiones relacionadas con nuestros estudios y la Facultad, procurando la presencia y la opinión de los profesionales de prestigio y de sus asociaciones. Se firmó un acuerdo con la Asociación Española de Editores (AEDE) creando la Cátedra Ortega, gracias a la cual pudieron pasar por la facultad  la práctica totalidad de los profesionales de prestigio, convirtíendose así  en un lugar de encuentro y de debate obligado entre medios o profesionales claramente antagónicos.

Se firmó un acuerdo con el Congreso de los Diputados por el que fue nuestra Facultad la encargada de la señal audiovisual de la Cámara una vez que se renovó la tecnología, se robotizó el sistema y se impidieron los accesos directos de todas las televisiones, que una vez creadas las privadas resultaba imposible de contener. El resultado fue una absoluta y extraña unanimidad de partidos políticos y profesionales, expresada en la mesa que se creó a tal efecto y en la que participaba el propio decano, sobre la excelencia del trabajo realizado íntegramente por profesores y alumnos de la facultad.

Es esa etapa de la Facultad, se llegó a un record absolutamente histórico en el número de alumnos, que llegaron a sobrepasar los dieciséis mil, entre ellos algunos tan ilustres como la que sería más tarde la Princesa Leticia. Fue necesario negociar duramente para conseguir lo que parecía imposible, un nuevo edificio, cuando estaba ya prácticamente cerrado el PERI que ordenaba la edificabilidad del campus de Moncloa. Se consiguió y hoy aporta a la Facultad instalaciones de aulas, despachos, Salón de Actos y Garaje, de uso habitual. Por cierto, el Garaje del primer edificio resultaba tan escaso, que se llenaba siempre con los primeros trabajadores de limpieza y cafetería que llegaban a la Facultad. Este hecho originaba permanentes discusiones en la Junta de Facultad porque los profesores tenían dificultades de acceso. Se resolvió, una vez pedido el nuevo edificio previsto con garaje más amplio, eliminando el antiguo garaje y construyendo en su lugar aulas informáticas avanzadas, que resolvieron el espacio de los primeros másteres y que hoy siguen en pleno rendimiento. 

Durante su Mandato se celebraron los primeros veinte años de existencia de la Facultad, cuyo padrinazgo aceptó el Príncipe Felipe (actual Rey Felipe VI), con un Congreso Científico, y un concurso artístico que permitió dotarnos con una escultura homenaje a la libertad de expresión. Libertad que defendió representando a los futuros profesionales en la Plataforma creada por los periodistas más importantes de nuestro país para defender el derecho de los ciudadanos a recibir información veraz ante la amenaza del Gobierno de definir  las denuncias como difamaciones y llevarlas al Código Penal. Cuando la Plataforma se disolvió el Decano era el Presidente de la misma.

 

Aportaciones científicas originales

Destaca la creación y posterior desarrollo del Periodismo Especializado como materia científica ligada a la Licenciatura de Periodismo y que se plantea como una auténtica Teoría General de la Divulgación. Como ramas específicas de esta materia destacan la información sobre ciencia y tecnología, sobre salud y medio ambiente y sobre economía, materias sobre las que se han realizado numerosas tesis doctorales y que se han integrado en líneas de investigación de diversos proyectos.

Es destacable así mismo la aportación sobre el periodismo de fuente, considerando su definición y su desarrollo posterior  unido a  la comunicación aplicada desde la perspectiva de la Comunicación Corporativa.

Además se pueden también considerar una  aportación las investigaciones que tienen que ver con la búsqueda de la calidad en la información periodística, y su exigencia para audiencias infantiles y juveniles, temática que ha seguido en varias investigaciones subvencionadas públicas y privadas.